El recambio varietal y los desafíos del mercado del arándano chileno, el que ha visto un incremento significativo en el volumen y la calidad en las exportaciones de orígenes competitivos, fueron temas abordados en Fruittrade 2023, la mayor convención y exposición de la industria hortofrutícola chilena, donde expertos de todos los sectores del rubro se reunieron para abordar los temas más relevantes para el país y la región.
Andrés Armstrong, director ejecutivo del Comité de Arándanos de Chile señaló al respecto que, “hoy en día el escenario competitivo cambió. Un tiempo atrás estábamos (Chile) prácticamente solos en el mercado y esa no es la realidad actual.”
Armstrong se refirió al modelo productivo chileno que fue muy exitoso durante muchos años, sin embargo aseguró que es importante revisarlo a la luz del incremento en la producción de otros países, que no están solamente durante las ventanas donde no había mucha producción local, sino que se cruzan directamente con la ventana de exportación chilena.
“En el último IBO del mes pasado en Polonia, vimos que el aumento productivo de los últimos cuatro años ha sido de un 77% en el mundo, liderado por el crecimiento que ha habido en China y en Perú al igual que México, Marruecos y Sudáfrica, reduciendo considerablemente los volúmenes de Chile, Argentina, Canadá y Estados Unidos”, agregó.
Oportunidad para esta temporada
Se anticipa que el fenómeno de El Niño tendrá un efecto en la producción de arándanos de Perú, reduciendo el volumen para esta temporada. Aunque no hay nada confirmado aún, esto le abrirá una ventana a la fruta chilena para enviar su producto.
“Creemos que puede ser una oportunidad para mostrarle al mercado que sí podemos ser un actor complementario, competitivo y de valor en el mercado, porque los clientes se dan cuenta de que no pueden poner todos los huevos en la misma canasta, por ende necesitan de Chile, pero con fruta en buena condición,” fue el llamado de Armstrong.
Cómo seguir siendo competitivos a nivel mundial
Ruy Barbosa, gerente de North Bay Produce, habló sobre el potencial de consumo que existe actualmente y la importancia de adaptarse a lo que el consumidor busca.
“El arándano está catalogado como una superfruta, por lo que es muy beneficioso para la salud y su consumo se repite mucho, generando un gran margen de contribución en los comercializadores y supermercados”, dice Barbosa.
La experiencia del consumidor va relacionada directamente al sabor y la consistencia, y Barbosa asegura que el producto de Perú es mucho más consistente que el de Chile en estos momentos.
No solo los consumidores buscan un producto con más firmeza y mejor sabor, también los supermercados están exigiendo un producto de calidad que nos les genere reclamos en la posventa y le de mayor categoría a su marca.
Un estudio realizado por el Comité de Arándanos de Chile hace unos años mostró que en un clamshell de arándanos provenientes de productores locales, tan solo se podían comer alrededor del 65% del contenido, algo que le quita muchos puntos a la fruta chilena.
Es por esto que las nuevas variedades premium utilizadas por marcas como North Bay Produce, buscan una calidad consistente en todos los envíos con disponibilidad las 52 semanas del año, para bajar el nivel de rechazo en los puntos de venta.
“Estas variedades (Sekoya), nos permitirán tener una consistencia potente y una oferta que le de confianza al supermercado y al consumidor para llevársela a ojos cerrados”, aseguró Barbosa.
No basta solo con recambio varietal
Julia Pinto, gerente técnico del Comité de Arándanos, se refirió a la importancia de educar a los productores que busquen plantar variedades nuevas, indicando que, “no basta con tener una buena variedad para el recambio, si no que además tengo que hacer bien varias cosas, incluyendo donde ubico la variedad. Si colocamos una variedad en un lugar donde no corresponde, no le estamos sacando el provecho suficiente”.
Lograr lo que Pinto denominó como las tres C: calidad, condición y consistencia, al hablar de nuevas variedades es un desafío para el país.
“A nosotros nos cuesta más tener el resultado inmediato de una variedad, porque para ver si una de ellas resulta nos podemos demorar tres años”, explicó Pinto y añadió que, “al momento de elegir una variedad, tengo que construirla bien, la variedad no es todo”.
Para Pinto, el valor de la fruta chilena está en que es naturalmente rica, un valor diferenciador importante de cara al mundo.
La experta compartió su experiencia en el IBO Summit 2023 donde se discutieron las estrategias para el éxito de la industria arandanera a nivel mundial, que son las siguientes:
- Mayor eficiencia y productividad a través del recambio varietal.
- Economía de escala, consolidación y el crecimiento en regiones con costos más bajos. En este punto los productores deben ser más productivos, con más kilos por hectárea a menos costo.
- Aumento en estándares de calidad a través de nueva genética, variedades con mejor firmeza, sabor, calibre y vida útil de los arándanos.
- Mejorar la calidad es clave para el crecimiento de la demanda. Un cliente satisfecho es uno que volverá a comprar arándanos.
- Sostenibilidad: en este punto los genetistas deben trabajar en variedades que tengan menores requerimientos de consumo de agua.
- Desarrollar y trabajar con variedades que sean resistentes al cambio climático, específicamente a las olas de calor cada vez más frecuentes en Chile es otra clave para lograr el producto que se está buscando.
30/08/2023